diumenge, 18 de juliol del 2010

Una lliçó de Neruda sobre poesia

Trobo, en un llibre de Pablo Neruda publicat pòstumament (1978), Para nacer he nacido –gran títol!–, l’assaig breu “Sobre una poesía sin pureza”, en què el poeta fa un al·legat a favor de la poesia impura, ço és, d’una lírica que es rebolqui sense escrúpols en el jaç i en el llot de la condició humana. És un text que subscric de dalt a baix, i perquè em plau, us en mostro un bocí:

“Es muy conveniente, en ciertas horas del día o de la noche, observar profundamente los objetos en descanso: Las ruedas que han recorrido largas, polvorientas distancias […] La superficies usadas, el gasto que las manos han infligido a las cosas, la atmósfera a menudo trágica y siempre patética de estos objetos, infunde una especie de atracción no despreciable hacia la realidad del mundo. La confusa impureza de los seres humanos se percibe en ellos, la agrupación, uso y desuso de los materiales, las huellas del pie y de los dedos, la constancia de una atmósfera humana inundando las cosas desde lo interno y lo externo.

Así sea la poesía que buscamos, gastada como por un ácido por los deberes de la mano, penetrada por el sudor y el humo, oliente a orina y a azucena salpicada por las diversas profesiones que se ejercen dentro y fuera de la ley. Una poesía impura como un traje, como un cuerpo, con manchas de nutrición, y actitudes vergonzosas, con arrugas, observaciones, sueños, vigilia, profecías, declaraciones de amor y de odio, bestias, sacudidas, idilios, creencias políticas, negaciones, dudas, afirmaciones, impuestos.

La sagrada ley del madrigal y los decretos del tacto, olfato, gusto, vista, oído, el deseo de justicia, el deseo sexual, el ruido del océano, sin excluir deliberadamente nada, la entrada en la profundidad de las cosas en un acto de arrebatado amor, y el producto poesía manchado de palomas digitales, con huellas de dientes y hielo, roído tal vez levemente por el sudor y el uso. […] Quien huye del mal gusto cae en el hielo.”

Em demano si aquesta lliçó ha estat prou assumida en la poesia catalana (penso en Vicent Andrés Estellés, Carles Hac Mor, Joan-Elies Adell, Sebastià Alzamora…) i em responc que sí, esclar. I, bo i així, intento recordar versos que facin olor d’orins i assutzena i sóc incapaç d’evocar-ne cap. D’esperma sí que anem ben servits, però… d’orins?

2 comentaris:

Clidice ha dit...

és clar que en això de la poesia no en sóc pas una experta, però potser si que tens raó i cap poema fa pudor de pixum

Joan Calsapeu ha dit...

Ara mateix recordo aquell poema tan bo de l'Estellés, de "L'hotel París", i el trobo de seguida. És el número XXI, que comença així, "com hi ha els fills sense els pares i els pares sense el fill", i una quinzena de versos més avall surt "la portera [que] va pixant per l'escala / i trucant a les portes amb un colp de mamella".

Però el poema no fa pudor de pixum.